lunes, 3 de marzo de 2014

Africa no existe

"Este continente es demasiado grande para describirlo. Es todo un océano, un planeta aparte, todo un cosmos heterogéneo y de una riqueza extraordinaria. Sólo por una convención reduccionista, por comodidad, decimos Africa. En la realidad, salvo por el nombre geográfico, Africa no existe".
                                                                  R. Kapuscinski en "Ebano"

Sin reconocer ese "cosmos heterogéneo" que es Africa habría sido imposible para muchas empresas entrar al continente. Habrían quedado atrapadas en esa imagen de pobreza, guerras civiles, enfermedades, golpes de estado y corrupción con la que usualmente lo asociamos. Si bien es cierto que estos problemas han azotado en mayor o menor medida a muchos países del continente, también es necesario destacar que en la últimas dos décadas han existido progresos notables. Y esta parte de la historia es menos conocida. A modo de ejemplo, el índice de percepción de corrupción en el sector público, elaborado por Transparencia Internacional, muestra a Botsuana, Ghana, Ruanda y Sudáfrica como menos corruptos que India y China en su ranking del 2013. Estos cuatro países africanos también presentan un entorno regulatorio que hace más fácil comenzar y operar un negocio que en India y China, de acuerdo al ranking Doing Business 2014 del Banco Mundial. Y podríamos seguir con otros ejemplos.

Hoy en día, ya no sólo se instalan en Africa empresas dedicadas a la explotación de recursos naturales destinados a la exportación, sino también compañías que ven al continente como un centro de consumo. El año recién pasado L'Oreal compró la división de productos de belleza de Interconsumer Products, una de las empresas manufactureras de productos de belleza y de cuidado personal más grandes de Kenia. Walmart adquirió el 2011 una participación mayoritaria de Massmart, una empresa sudafricana con presencia en varios países del Africa Subsahariana. Samsung ensambla televisores en Nigeria y se espera que en un futuro cercano haga lo mismo con teléfonos celulares en algún país del continente. Historias como éstas se están repitiendo con mayor frecuencia.

Muchas de estas empresas han sido líderes en la expansión de sus operaciones hacia el continente. Todo esto con el propósito de fidelizar a una masa de consumidores cuyos ingresos están creciendo rápidamente y, de esta forma, poseer una ventaja sobre nuevos competidores que surjan en el futuro. Además, en muchos casos obtienen retornos sobre la inversión que son más altos que los ofrecidos en otras regiones del mundo. Con una población de 1100 millones y que se estima alcanzará 2400 millones el 2050, Africa ofrece grandes oportunidades de negocios.

Las empresas que planeen entrar al continente deben ser conscientes de que "salvo por el nombre geográfico, Africa no existe". Sólo así serán capaces de aprovechar las distintas oportunidades y mitigar los riesgos que tendrán que enfrentar.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario